Esta mañana el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) ha resuelto bajar a alerta técnica verde el Complejo Volcánico Nevados de Chillán, que desde el 2015 se encontraba con amarilla, en un proceso eruptivo que duró más de 7 años.
Este ciclo en sus inicios trajo como consecuencia la creación de varios cráteres pequeños que dieron paso a un cráter mayor denominado Nicanor, donde se concentró gran parte de la actividad del proceso eruptivo, generando 8 flujos de lavas de alcance que no superaron los 2 kilómetros de longitud. También se formaron algunos domos de lava, que ocasionaron explosiones menores y emisión de cenizas fina que en alguna ocasione se percibió en localidades cercanas como Las Trancas.
Durante este periodo, el Complejo Volcánico llegó como máximo a alerta técnica naranja el 2018 con el surgimiento de un gran domo que se destruyó al cabo de unos meses. La determinación de bajar a alerta verde se fundamenta en que desde mediados de octubre de 2022 el Complejo Volcánico no presenta actividad superficial, aunque Sernageomin mantuvo por algunos meses más en alerta amarilla dado que el volcán todavía mostraba indicios de actividad interna. No obstante, se concluyó que en la actualidad no hay suficiente energía o material que se esté liberando en superficie.
Para Álvaro Amigo, Subdirector Nacional de Geología (s) de Sernageomin, “este fue un ciclo eruptivo que nos dejó bastantes enseñanzas, donde intensificamos la vigilancia a través de sensores satelitales, los que nos permitió obtener imágenes de alta resolución para identificar cambios superficiales, análisis de anomalías térmicas, movimientos y deformación a través de sensores de radar y la construcción de modelos de elevación digital. También permitió afianzar la coordinación con SENAPRED de Biobío, que en el proceso eruptivo pasó a pertenecer a la nueva región de Ñuble. Además, debemos destacar que en estos años una de las grandes enseñanzas es el trabajo mancomunado alcanzado con las comunidades locales, ya que se logró un contacto fluido que, independiente de la alerta en que se encuentre el volcán, se cuenta con las herramientas para establecer una rápida coordinación”.
Agregó que “independientemente que el proceso eruptivo en la actualidad ha cesado, no se descarta que en el futuro podamos observar una reactivación. Cabe destacar que en la década de los 70 y 80 del siglo pasado, se observó un ciclo eruptivo de características similares, con una pausa intermedia. Hoy se mantiene cierta actividad interna, por lo tanto, podrían ocurrir explosiones, lo que justifica mantener una zona de potencial en el entorno inmediato al cráter activo”.
Por su parte Mauricio Tapia, Director Nacional (s) de Senapred comentó que “hace 7 años que el Complejo volcánico Nevados de Chillán se mantenía con alerta amarilla, por ello esta actualización a una Alerta Temprana Preventiva para las comunas de Pinto y Coihueco, es una buena noticia en virtud que la actividad ha permanecido en niveles considerados bajos, sugiriendo un paulatino retorno a la estabilidad. En este contexto, es importante destacar que se mantendrá una zona de peligro de 500 metros alrededor del cráter activo, atendiendo que pudiesen presentarse eventos puntuales asociados a la actividad del volcán. Por otra parte, el llamado a la ciudadanía es a mantenerse informada a través de los canales oficiales y actuar siempre con precaución frente a esta amenaza.
Actividades con localidades aledañas al CV Nevados de Chillán
Un aspecto para destacar es que en este ciclo eruptivo debutó el perímetro de seguridad, donde la Delegación Regional del Ñuble decretó una restricción de acceso a la zona en función a la zonificación de peligro realizada por Sernageomin. Luego, se aplicó esto mismo en los volcanes Villarrica y Láscar.
Diversas actividades de divulgación y comunicación con las comunidades se realizaron en estos 7 años de alerta amarilla del Nevados de Chillán, entre ellas, capacitaciones, simulacro de erupción volcánica y una Feria de Divulgación Volcánica en San Fabián de Alico, junto a un arduo trabajo territorial con Senapred y los municipios respectivos.
Asimismo, se trabajó en una de las primeras versiones de los Puntos de Encuentro Transitorios (PET) para las comunas de Pinto, Coihueco y San Fabián de Alico. Este mismo trabajo se realiza en varios volcanes en Chile.